Es de todos conocido que las prestaciones de la Raspberry son un pelín limitadas a la hora de ponerla en el banco de pruebas. La velocidad de la Raspberry puede parecer algo baja a algunos usuarios. El diseño de la Raspberry nos ofrece la posibilidad de aumentar un poco la velocidad de la misma y ¡¡ sin perder la garantía !!. Para ello utiliza la técnica del «overclocking». Dicha técnica se basa en aumentar ligeramente la velocidad de reloj a la que opera la CPU de un sistema. Mediante el «overclocking» podemos aumentar la frecuencia del micro hasta un máximo de 1 Ghz.
Nota: No hemos de confundir el «overclocking» con el «overvolting», el cual está totalmente desaconsejado por el fabricante y, además, si que supone la pérdida de la garantía.
Para llevar a cabo esta prueba vamos a realizar los pasos siguientes:
- Medir la velocidad actual de nuestro sistema.
- Efectuar un overclocking y verificar de nuevo la velocidad.
Midiendo la velocidad del sistema
Vamos, antes de nada, a efectuar una prueba de velocidad en nuestra Raspi, la cual nos servirá para monitorizar el resultado de la técnica comentada posteriormente. Para efectuar una medición simple de la velocidad a la que opera nuestra tarjeta podemos hecer uso de un comando Linux que ejecute un proceso matemático de forma repetitiva y que nos devuelva el tiempo de ejecución del mismo. Para ello utilizaremos el comando bc con alguna parametrización añadida.
¿Qué que hace el comando bc? … pues básicamente realiza cálculos matemáticos desde el terminal.
Como quiera que alguna distribución no lleva instalada por defecto esta aplicación, lo que hacemos es instalarla mediante el comando
sudo apt-get install bc
Una vez instalada podemos verificar su operativa entrando en ella, efectuando un pequeño cálculo (5+44 en nuestro ejemplo) y saliendo con la opción quit.
Ahora que la utilidad bc está operativa vamos a manejarla añadiendo alguna configuración extra: efectuaremos un cálculo con parámetros externos al comando bc.
Para esto haremos uso de la técnica que Linux nos ofrece con su opción «pipe» (traducida normalmente como entubado o canalización de órdenes). Al usar el símbolo «|» (obtenido en el teclado español mediante AltGR + 1) se canaliza la información anterior al «pipe» hacia la función o comando situado tras el mismo. Y como nada es más visual que un ejemplo, allá vamos …
En este caso vamos a ejecutar una simple multiplicación de 2 cifras, para lo que «canalizamos» los parámetros a operar hacia el comando bc :
1 |
Nota: echo es el encargado de mostrarnos el resultado en pantalla. |
echo «33*44» | bc
Y ya sin más, vamos a efectuar el esperado cálculo que ponga a nuestra Raspi a funcionar al 100% … midiendo su velocidad estándar, claro está.
En el ejemplo usado – y sin entrar en disquisiciones matemáticas – efectuaremos un cálculo del número Pi ( ¡¡ con 2500 posiciones decimales !! ) usando la función arcotangente incluida en el comando bc, y obteniendo el tiempo de ejecución de la mista (time).
time echo “scale=2500;4*a(1)“ | bc -l
1 |
Nota: añadimos el parámetro <strong>-l</strong> para incluir las librerías necesarias |
Vemos que el resultado de esta operación ha sido de 42,59 segundos.
Efectuando el “overclocking“ y midiendo …
En la Raspberry Pi podemos efectuar un overclocking mediante la parametrización que la misma recibe desde el fichero de configuración inicial (config.txt).
Nota: en caso de necesidad podemos acceder a config.txt también
desde otro PC (Win, Mac o Linux), ya que este fichero es «visible»
por otros sistemas desde la raiz de la tarjeta SD.
Para editar el fichero config.txt ejecutaremos desde una terminal
sudo nano /boot/config.txt
Vemos aqui la zona donde debe editarse el fichero. Si el parámetro ya existiera, bastará con des-comentarlo (eliminamos el símbolo # que le precede), y modificarlo a nuestro gusto.
Modificamos arm_freq=800 para que quede : arm_freq=900
En este caso aumentamos la frecuencia del micro a los 900 Mhz (su valor por defecto es de 800 Mhz).
Una vez efectuados los cambios oportunos en el sistema deberemos volver a medir cómo afectan los mismos a la velocidad de proceso. Es importante reiniciar el sistema antes de hacerlo, para lo que usaremos el comando
sudo reboot
Medimos de nuevo y vemos que el resultado de esta operación ha sido de 42,45 segundos. No es mucho, pero nos sirve para verificar que el overclocking está operativo.